miércoles, 24 de abril de 2019

RUTA LITERARIA 'LA CELESTINA'


Sofía Fernández y Rebeca Mediel (1º Bto A)

El día 28 de marzo realizamos una ruta literaria por el casco viejo de nuestra ciudad en relación al famoso libro que leímos el trimestre pasado y del que todos conocemos su historia llamado La Celestina.

Primero fuimos a la plaza San Felipe donde nos encontramos con unas chicas las cuales nos iban a acompañar durante toda la ruta y quienes nos fueron explicando en cada parada información y datos sobre esta obra.

En nuestro caso la persona que nos acompañó fue Nines, quien nos introdujo La Celestina realizando varias preguntas para que pudiésemos contribuir todos en la introducción de la obra. Algunas de las preguntas fueron el año de la publicación del libro, que fue en 1499, a qué se dedicaba Celestina… Nines nos contó que al principio esta obra era conocida como Tragicomedia de Calisto y Melibea,  aunque realmente de comedia no tiene nada ya que todos sabemos lo mal que acaba esta triste historia de «amor».
Nuestra siguiente parada fue el museo Pablo Gargallo, el cual Nines asociaba con la casa de Melibea ya que posee características similares a la posible casa de la enamorada. Al entrar vimos una de las obras del pintor y escultor aragonés que mejor representa lo que es el amor y sus síntomas. Algunos de los que podemos resaltar son las famosas mariposas en el estómago, ansiedad o no de comer, tener en la cabeza todo el día a esa persona especial…

También hablamos de las fases del amor cortés las cuales eran, primero, enviar poemas a la enamorada, después las caricias, más tarde darse la mano, luego el beso y, por último, las relaciones íntimas. ¿Y por qué hablamos del amor cortés? Porque nuestro protagonista Calisto se saltó el orden de las fases ya que solo quería llegar a la etapa final. Para ello, contrató a Celestina para que hiciese un hechizo y así poder tener relaciones con Melibea.
Después de esta parada, salimos del museo y vimos un mural en la calle Torre Nueva  en el que podíamos ver cómo de torcida estaba la torre que antiguamente había en esa plaza y con la que gracias a sus campanadas, Calisto y Melibea podían quedar a medianoche.

Un dato de interés sobre esta torre es que cuando querían tirarla porque estaba torcida y la veían como un peligro para todos, sacaron dinero cobrando una entrada para subir a lo alto de la torre y así financiar los costes de la destrucción de esta torre.


Seguimos con la ruta en la iglesia de Santa Isabel de Portugal donde observamos su fachada y pudimos ver las caras endemoniadas que había en ella y así poder explicar lo que suponía la deshonra de las mujeres en esa época. El suicidio de Melibea estuvo relacionado con esto, ya que cuando Calisto murió, la joven  se vio «obligada» a acabar con su vida ya que había perdido una de las cosas más importantes para la mujer y su familia, su honra.


Más adelante fuimos al Mercado Central donde antiguamente era el lugar en el que ahorcaban a los delincuentes pobres. Era una forma de sufrimiento y vergüenza para ellos ya que morían delante de todo el mundo y muy lentamente. Las familias aprovechaban la noche para intentar coger los cuerpos y así poder enterrar a sus familiares dignamente, aunque les era difícil porque estaban custodiados por un alguacil. Las hechiceras como Celestina robaban uñas, dientes, etc. de los ahorcados para realizar hechizos.

El procedimiento del ahorcamiento de los criados de Calisto, Sempronio y Pármeno, se ve reflejado en este ritual debido a que fueron condenados con este castigo tras matar a Celestina por codicia.

Ya casi terminando la excursión, fuimos a las escaleras de la iglesia de San Juan de los Paneles. Allí Nines nos explicó cosas sobre la menstruación inimaginables en la actualidad. Una de las afirmaciones de la época era que si tenías el período era señal de que el fluido masculino no había llegado a su objetivo y se había podrido y por eso la mujer sangraba.

También hablamos de que cuando la mujer perdía la honra tenía dos opciones. La primera era meterse a monja, pero sólo podías si tenías dinero; la otra era o dedicarse a la prostitución o ser criada. Irónicamente, la mejor opción si no tenías dinero era ser prostituta.

Finalmente, fuimos a la basílica del Pilar. Una vez dentro hablamos del ideal de la mujer de la época de la Celestina, el cual era parecerse a la madre de Jesús, la Virgen María. Este ideal era algo imposible de conseguir pero el sueño de muchas mujeres.

También hablamos de temas no relacionados con la obra pero sí de interés como por ejemplo del karma, del machismo… Una vez ya terminado el mini debate despedimos la visita con un fuerte aplauso para Nines.

Personalmente, fue una sorpresa ya que nos esperábamos que fuese una excursión menos entretenida, pero las chicas encargadas de la ruta hicieron que la sintiéramos amena para todos y de interés.